Me da algo de pena hacerlo, pero he de constar por este medio que hace algunas semanas me fui unos días de mi casa. ¿El motivo? Principalmente es atribuido a la superflua afirmación de que no encontraba paz interior y que mis problemas, a causa de la duda respecto a mi "identidad", pareciera que se unificaban hasta convertirse en una enorme pila de mierda. Por tal motivo, mis problemas personales se volvían imposibles de analizar con la finalidad de encontrarles una posible solución. Esos fueron los motovos de esa precipitada descición: pero valió la pena, puesto que me topé con varias respuestas.
Hace unos días, estaba en una fiesta (o, por su definición vulgar actual, peda) con varios amigos y conocidos. Me tomó algunos minutos, pero hayé a varias personas con quienes hablar de un tema (esas fiestas siempre estan llenas de parejitas y desconocidos...). Durante el transcurso de la charla, le conté a una amiga sobre un ensayo de novela en el que he estado trabajando desde hace tiempo. Me habían dicho que esta mujer era buena escribiendo y creando temas para composiciones, y en ese momento habría de comprobarlo. Hablamos por casi dos horas en las que me dió puntos de vista, climax, desarrollos, finales, comentarios, argumentos; hasta que llegué al punto donde los comentarios pasaron de ser simples opiniones a ideas considerables, por lo cual modifique y proyecté mentalmente los cambios que habría de hacer a mi escrito. Pensé un momento que esas ideas habían modificado casi por completo la historia que redacto como pasatiempo y futura ocupación.
Hbaiendo explicado eso, ayer me dispuse a desglozar esas ideas en el teclado y aplicarlas en el escrito para modificarlo. Fui al baño antes de comenzar. Me lavé la cara y mientras mis manos se deslizaban por mis mejillas, me miré fijamente en el espejo y me acordé de algo que esa mujer me había dicho la noche anterior que me hacía eco en ese momento: "No pienso morirme sin haber publicado un Best Seller...". Volví a concentrarme en mi y le dije a mi reflejo "Que pendejo eres...". Ahí medité que me había dejado convencer de cambiar mi escrito por que a alguien le había parecido (segun sus metodos y estilos) aburrido y predecible. ¿Me fui de la casa para saber quien soy y me topo con que no salgo de hacer ese tipo de mamadas? ¿Ese era yo entonces? ¿Dubitatibo? ¿Inseguro? ¿Complaciente? ¿Predecible? ¡A la mierda! Si es aburrido, me importa una verdadera mierda. Si es predecible, me da gusto por que se parece a mi.
Terminé dandome cuenta de que de haberla modificado como lo tenía previsto, hubiera contradecido todo lo que creo y que tanto me demoré en comprender respecto a mi. Escribo de lo que sé, de lo que conozco, exploro erroneamente situaciones y sentimientos que soy incapaz de experimentar por el simple hecho de molestar a la gente o parecer intelectual, mi estilo encuentra su refugio en el underground. No busco publicar un Best Seller por que sé que terminaría convirtiendome en un imbecil, como Stephanie Meyer (o como coños se escriba el nombre de la castradora oficial de las historias de vampiros). Mis personajes son estéticamente comunes por que me encanta explotarlos psicológicamente, por que es lo que conozco. Así es como vivo. Esa es mi realidad. Me cagan las historias de amor y éxito personal, por tanto pienso que son predecibles aunque concluyan en tragedia (esto por que de una historia estrictamente rocker, terminé siendo complaciente y estúpido hasta adaptar mi historia a una ñoñez de amor y desenlaces inesperados y mamadas así...).
Reafirmo, mis historias son underground. Jodidas. De adolescentes siendo puteados por uno y mil demonios personales. De personajes comunes tirados a la mierda, carentes de una estética rara para llegar a un interés carnal (por que recaes en lo mismo... ¿No es lo estético lo primero en lo que nos fijamos?). Llena de chistes mamones, raciales, antisemitas, políticos. Situaciones mala leche. Indie. Aburrido. Predecible. Propio. Sin embargo, soy un buen mexicano, así que me chingaré unas deesas ideas para hacer una historia un tanto más compleja. Y bueno, si a ella no le gusta, que agarre sus ideas y publique su novela antes que yo (en cualquier caso, puedo demandar...). Admito que la culpa de dejarse convencer fue mia, pero es como yo siento que han de darse y pueden darse las cosas... a la mierda si se siente ofendida.
Sin embargo, me contradigo en lo siguiente: me gustaría participar en "Premio Alfaguarra de Novela", por que es una editorial de renombre internacional y me gustaría ser reconocido como escritor (monetariamente, claro...). Modo de saber si es que tengo un nivel verdaderamente suficiente como para estar a la altura de mis autores favoritos, o si he de convertirme en un literato de Culto. Esto del premio tiene como objetivo servirme de motivación para concluir en un lapso de tiempo deterninado mi escrito, mientras prendo un cigarro y me rasco los huevos diciendome "Fracasar a lo grande y levantarse, o triunfar mediocremente y superarse...". Asì que, mientras termine mis obras y encuentre una editorial que los publique, y haya gente que haya gastado en su compra por curiosidad o lástima o solidaridad, y utilice su tiempo para leerlo por completo, y decirse como crítica personal "Está malisimo...", yo ya habré triunfado. Al menos, personalmente.
